Anoche, los seguidores de los Los Angeles Lakers recibieron un duro golpe cuando su equipo fue eliminado de la contienda por el título de la NBA, cayendo ante los Denver Nuggets por segunda vez consecutiva, esta vez en una serie de cinco juegos.

Tras el final del encuentro, LeBron James, líder indiscutible de los Lakers, enfrentó a los medios con una incertidumbre latente sobre su futuro, tanto con el equipo angelino como en la NBA en general. James expresó su deseo de pasar tiempo con su familia antes de unirse al equipo estadounidense que competirá en los Juegos Olímpicos de París 2024, programando un campo de entrenamiento en Las Vegas en los próximos meses.

"Ahora mismo solo quiero volver a casa con la familia", declaró James. "En un par de meses tengo que ir a Las Vegas para el campo de entrenamiento. Así que voy a descansar mi cuerpo para el equipo de Estados Unidos. Esos son más o menos los pensamientos iniciales", agregó.

Además de compartir sus planes inmediatos, LeBron elogió el rendimiento de los Nuggets durante toda la serie de playoffs y discutió la posibilidad de jugar junto a su hijo en el futuro. Reconoció el mérito del equipo de Denver, calificándolos como "los campeones" y destacando su capacidad para ejecutar jugadas cruciales.

"Aunque he pensado en ello en el pasado, al final el chico tiene que hacer lo que quiera", comentó James sobre la posibilidad de jugar con su hijo. "Él decidirá lo que quiere hacer y cómo quiere que vaya su carrera", concluyó el tres veces campeón de la NBA.