Debido al éxito que tuvieron las camas "anti-sexo" durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, las cuales se llevaron a cabo en 2021 debido a la pandemia de COVID-19, se ha decidido repetir su aparición para la edición de París 2024, que se llevará a cabo el próximo verano.

Las camas ya han llegado a la Villa Olímpica, sede del alojamiento de los atletas, y están diseñadas para ayudar a que estos se mantengan concentrados en sus competencias y no en asuntos románticos.

Estas camas, fabricadas de cartón, cuentan con cojines que componen el colchón y se dividen en tres piezas que pueden amoldarse de acuerdo con las necesidades del atleta, gracias a su construcción que va desde uno muy firme hasta uno más suave.

Además de ser muebles inteligentes capaces de soportar atletas de diferentes pesos, los propios deportistas podrán personalizar sus camas a través de una aplicación. Mediante esta, podrán solicitar camas adaptadas subiendo fotos de su cuerpo, especialmente de hombros, caderas y pies.

Motokuni Takaoka, CEO de la empresa Airwaves, fabricante de estas camas, señaló que se distribuirán 16 mil camas para los Juegos, de las cuales 12 mil serán para los atletas y 4 mil para la prensa.

Además, mencionó que una vez que concluyan los Juegos Olímpicos, todos los colchones serán donados a diversas organizaciones, incluyendo la milicia francesa, la Escuela de Ópera y Ballet de París, y la Escuela de Hostelería Tsuji.